El cuidado adecuado de los instrumentos

Por Julián Eduardo Lozano, 11B


Según EcuRed, la luthería es un arte que consiste en la construcción de instrumentos musicales, principalmente en la edad media, al artesano que construía instrumentos musicales se le conocía como hacedor de instrumentos y se enfocaba en los instrumentos de cuerda o cuerda frotada, con cajas de resonancia y mástil, y con el pasar el tiempo, al artesano se le comenzó a denominar como luthier o lutier, y no solo se encargaba de hacer instrumentos, sino también de repararlos e incluso venderlos.



Conocí este bello arte gracias al maestro Ernesto García, pues en mi primera clase de instrumento, el saxofón, al entrar al salón del maestro vi un cuadro con un saxofón desarmado y todas sus partes, yo le pregunto por qué tenía ese cuadro ahí y él me dijo que tiene un taller de instrumentos, y en ese momento quise saber qué es un taller de instrumentos, él me explicó que él es un lutier, tampoco tenía idea de que era eso, me comento al respecto, que el taller es como un hospital de instrumentos, porque ellos necesitan cuidados especiales y tratamientos para que estén bien y tengan una vida duradera y se conserven en un buen estado al pasar de los años, teniendo unas pautas de un cuidado para los instrumentos, como las siguientes: 

• Si el instrumento está totalmente nuevo posee una laca, que al pasar los años se va cayendo de a poco; para prevenir esto y conservar la laca del instrumento en óptimas condiciones es indispensable que después de cada uso o estudio con el instrumento , éste sea limpiado con una bayetilla, con el fin de retirar el sudor, grasa y en algunos casos, un poco de saliva, porque esas secreciones de nuestro cuerpo deterioran el instrumento, entonces es aconsejable limpiarlo constantemente por las partes exteriores.

• Después de tocar con el instrumento, es necesario limpiar, en el caso de los instrumentos de viento la parte interna de ellos, pasando una bayetilla por el interior del instrumento de una manera nada brusca, para así mismo dejarlo sin agua y saliva en su interior 

• No dejar caer ni golpear el instrumento, así sea que esté dentro del estuche, ya que incluso así este sufre daños, pues se puede descalibrar, haciendo que sus llaves y zapatillas se descuadren y el aire a presión del interprete se escape por los diferentes orificios del mismo instrumento y suene desafinado; el mal trato y los golpes también pueden dañar la superficie del instrumento, lo cual, además, produce desafinación y afecta el buen funcionamiento del instrumento.



En mis clases de instrumento también he aprendido otros aspectos del manejo de estos en la Institución pues debido a que los recursos necesarios para hacer el debido mantenimiento constante de los diferentes instrumentos, es necesario que cada maestro sea muy estricto en el cuidado del instrumento de sus estudiantes y los oriente para que ellos lo implementen y, aunque no sea suyo el instrumento, lo cuiden como si lo fuera, ya que si se cuenta con unos instrumentos en buen estado, gracias al cuidado de todos, se podría tener un mejor avance en el aprendizaje musical, por ello, quien haga un mal uso del instrumento y lo maltrate, puede ser sancionado y perder la posibilidad de utilizarlo. 

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