Nuestro entorno

Por: Bryan Javier García

Quienes estudiamos actualmente en el Conservatorio de Ibagué somos muy afortunados en cuestión de espacios, nuestra Institución es campestre, esto no significa que cuidemos vacas o recibamos educación con relación a la vida agrícola, significa que contamos con una gran disponibilidad de zonas verdes, con una variedad bastante extensa de aves y por donde quiera que estemos siempre veremos una gran vegetación.

Todo lo mencionado anteriormente hace referencia a nuestros espacios ambientales, pero también contamos con más instalaciones, como vienen siendo teatro, capilla, cafetería, restaurante y un patio suficientemente grande, entre otros espacios.

Todos los espacios con los que cuenta la Institución son un privilegio que tenemos nosotros como integrantes de la misma, y depende de nosotros mantenerlos en las mejores condiciones posibles. Sin embargo ¿Nos preocupamos por nuestra institución? La respuesta a esto puede ser diferente para cada quien, pero personalmente pienso que no lo hacemos, y es muy desconcertante que no nos importe nuestro colegio. Al llegar a la institución podemos ver canaletas llenas de basura, una zona destinada para poder sentarse y comer, rayada por lapiceros y donde encontramos muchas hojas de papel que botan a diario. En la parte trasera sucede lo mismo.

Un colegio que nos ha brindado tantas cosas a nosotros como personas, en el sentido que nos ha permitido crecer, aprender y vivir una de las mejores etapas de nuestra vida, como viene siendo la adolescencia, debería ser un lugar querido por nosotros los estudiantes, un lugar en donde queramos conservar todo lo que nos brindó a nosotros.

Cuidar estos espacios no significa que vamos a convertirnos en aseadores o algo por el estilo, significa ser conscientes de la basura que llegamos a producir, de que los implementos que nos da se pueden dañar y que tenemos que mantener estos mismos lo mejor que podamos, ya que somos nosotros los que los vamos a usar y es nuestra responsabilidad mantenerlos en buen estado. Hasta ahora no demostramos que queremos la Institución o de cierta forma, que estamos agradecidos con lo que nos ha brindado. Pero es momento de ayudar a algo más grande, momento de ayudar a que las próximas generaciones puedan tener lo mismo que tuvimos nosotros y mucho mejor, momento de que empecemos a demostrar cuanto apreciamos nuestra Institución.